Onlyfans. La pendiente resbaladiza del consentimiento.

Enfoque

Onlyfans es una red social donde muchas jóvenes comparten imágenes y vídeos de contenido sexual a cambio de dinero. La entrada de algunas cantantes y famosas en Onlyfans ha contribuido a la normalización de la misma. Muchas chicas que nunca habrían pensado en acercarse a la industria de la pornografía o la prostitución, acaban atrapadas en el negocio del sexo al ser atraídas por la irreal fantasía de obtener cuantiosas ganancias con sus imágenes.

Hay que destacar que, lejos de ser inofensiva, Onlyfans es empleada como plataforma de captación por parte de empresas productoras de pornografía y redes de prostitución. La posibilidad de enviar mensajes privados permite que los hombres ofrezcan más dinero a las jóvenes a cambio de imágenes cada vez más explícitas o a cambio de encuentros sexuales en vídeo o en persona. El deseo de obtener una ganancia más elevada puede llevar a las mujeres a exceder sus límites iniciales vendiendo contenidos más explícitos.

La situación de desigualdad estructural arrastra a las jóvenes a una progresiva transgresión de sus límites. Las chicas son presionadas por sus “amigos” para enviarles “nudes” por Whatsapp, en un intercambio de mensajes que funciona como una escalera de contenidos cada vez más explícitos. Como expone Raquel Rosario (2021) una parte importante del placer que los varones obtienen con el sexo en la sociedad pornificada actual consiste en transgredir los límites del consentimiento, reduciendo de forma escalonada el poder de la mujer. Sea cual sea la práctica que ella no quiere hacer: sexo anal, sexo oral, tragar el semen…esa es precisamente la que más quiere lograr. Las jóvenes llegan a tener nula capacidad de negociar límites en las relaciones sexuales y padecen sexo inseguro, prácticas extremas y traumáticas que los jóvenes imitan de la pornografía.

Para la realización de esta ponencia, he realizado un análisis cualitativo de opiniones juveniles, en el que se observa que  muchas jóvenes acaban percibiendo Onlyfans como un paso lógico y ventajoso tras la cosificación normalizada de Instagram y el envío habitual de nudes a distintas parejas. Perciben que no existe una gran diferencia entre la prostitución y la situación que ellas han padecido en sus relaciones carentes de reciprocidad emocional. Se han sentido prostituidas sin obtener beneficio alguno y eso las conduce a pensar que sería inteligente aceptar una forma bien vista de compraventa sexual.  Amelia Tiganus (2021) describe cómo la violencia sexual es un elemento característico en la “fabricación” de la subjetividad de una “puta”. En suma, las jóvenes pueden pensar que no hay escapatoria a la cultura de la cosificación sexual, que su físico es la única fuente posible de validación social, y que es preferible asumirlo y poner un precio a su belleza.